El sitio web de una empresa debiera ser el centro de acción de su negocio, es decir, todo debiera nacer y cerrarse ahí, porque aunque existen distintas plataformas digitales para vender, como las redes sociales, los market place, entre otros, tu sitio web es tu mejor vitrina, porque es donde podrás mostrar todo lo que quieres, de la manera que prefieras.

El problema es cuando la página web se transforma en una especie de elefante blanco -que las empresas tienen casi por obligación- que no se actualiza, que no ofrece ninguna posibilidad de interacción y que nadie ve.

¿Es necesario que un negocio grande, mediano o pequeño tenga un sitio web? La respuesta es un sí rotundo, pero también es vital mantenerlo activo, porque eso hará que el negocio funcione.

En ese sentido, el SEO es fundamental, porque con acciones coordinadas, es posible aumentar la visibilidad de la página web de manera orgánica, esto es, sin invertir en anuncios (pagados).

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